Uno de los plagios más detestables, es el plagio de ideas.
A través de la apropiación de las ideas de otro(s) engañan a los demás, hacen creer que las ideas robadas son propias. Y sí, los demás se la creen pues ignoran la fuente original. Y muchas veces el plagiador, sin pudor alguno, le cuenta al mismo creador o autor de la idea y se la hace ver como propia, ignorándolo, sin darle crédito ni mucho menos decirle que le tomó (robó) su idea. Hasta debe de creérselo.
"El plagio literario, literal o de ideas, es robo como si te robaran lo que tienes en tu casa: te están robando tu propiedad, tu tiempo, tus pensamientos, hecho que es totalmente inadmisible", Pablo Boullosa.
“Hay dos tipos de personas, los que piensan y los que les roban el conocimiento a los que lo hacen, los que tienen ideas y los que las roban”. Montt |
"El problema del plagio está en hacer pasar como propio algo que es ajeno", José Emilio Pacheco.
5 comments:
Recordé "Alfonso Reyes y las comillas" publicado en este sitio. Un saludo con genuino aprecio, Magda.
Muy interesante el artículo que mencionas, Ferragus, lo escribió Evodio Escalante: http://apostillasnotas.blogspot.mx/2012/04/alfonso-reyes-y-las-comillas.html
Recibe un abrazo.
Totalmente. Una de las tantas faltas éticas que se cometen estos días. Creo que por eso deberíamos elegir a quien le contamos nuestras ideas: a la gente que las escuche, las proteja, las haga crecer.
Así es, hay que fijarse muy bien.
Aunque las ideas se roban aunque no se cuenten, a veces es la palabra escrita la que se plagia, otras veces es la palabra escuchada a través de, etc. Es casi imposible evitarlo, la falta de ética va de la mano.
Los plagiarios son cínicos y se creen sus propias mentiras a las que dan por reales. Pero además son hábiles en sus modus operandi, muy hábiles.
Las ideas son propiedades intelectuales (personales) y el plagiador jamás reconocerá haberlas robado, todo lo contrario.
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