10 de julio de 2008

Memín Pinguín, y otras cosas

Leo dos notas que me provocan no se si molestia o enojo, tal vez el no poder hacer nada me causa impotencia. La primera, es sobre el comic mexicano Memín Pinguin, creado por Yolanda Vargas Dulché en 1945, y dibujado por el maestro Sixto Valencia. La Historieta constó de 372 capítulos semanales en sepia y fueron reeditados en 1952, más tarde en 1961 y en 1988, esta vez a color. La reedición actual, llamada "Homenaje", es del 2005.

Yolanda Vargas Dulché, toma el nombre del apodo de su esposo, Guillermo de la Parra Loya, quién trabajaba en aquellos años en un banco y que luego sería el fundador de la Editorial Vid, a quien sus amigos le decían: "Memín Pinguín", por que era todo un pingo; o sea que era muy travieso ("Memín" es el diminutivo cariñoso de Guillermo; "Pinguín" es el diminutivo cariñoso de pingo). La historieta de Memin Pinguin, trata sobre las aventuras de Memin y sus entrañables compañeros Ernestillo, Carlangas y Ricardo. Memin, es un negrito simpático de edad indefinida, mediocre estudiante de tercero de primaria, que tiene una sinceridad conmovedora y un alma sin dobleces, pero también es malicioso y hasta tramposo. Tiene una terrible facilidad para provocar enredos, a los que arrastra a sus amigos. Su forma de explicar las cosas recuerda al cómico mexicano Cantinflas, ya que el "cantinfleo" se muestra en todo su esplendor. Los valores de amistad y familiares sobresalen en cada página y es de las pocas revistas que manejan el lenguaje popular.

De niña siempre leía las aventuras de Memín, no creo que haya mexicano que no hiciera lo mismo. No se si recuerden que hace algún tiempo comenté que de Ramón Valdiosera (escritor, escenógrafo, coleccionista, director de documentales, antropólogo, arqueólogo y diseñador de modas, "a él se debe la confección de trajes típicos regionales que aún identifican a la mayoría estados de la República", pero sobre todo historietista), fue la idea de llevar a Memín Pinguín, el negrito travieso, a los timbres postales con la complicidad de Sixto Valencia, otro de los grandes caricaturistas del país. Así, el 28 de Octubre del 2005 apareció Memin en cinco estampillas como parte de la serie "La caricatura en México" y en homenaje. Y aunque parezca increible (a mi sinceramente no me lo parece ni me sorprende en lo más mínimo), estas estampillas causaron controversia al ser consideradas por parte del gobierno estadounidense como racistas "por ser un estereotipo de la gente de raza negra".

Pero sigue "la mata dando", como dicen los jarochos, y el gobierno de Estados Unidos sigue metiéndose no solo en donde no lo llaman (que jamás ha necesitado pedir permiso para ésto en el mundo), sino usando lo que puede para su publicidad política. Señala la nota:

“Incluso algunos hispanos con conciencia saben que esta imagen es racista y totalmente inaceptable”, declaró Quanell X, un polémico dirigente comunitario afroestadounidense que se presentó a las puertas de una sucursal de Wal Mart en Houston para exigir el retiro de Memín Pinguín.

Tras recibirse las primeras protestas, los responsables de Wal Mart han procedido a retirarlas de sus anaqueles de libros y publicaciones en español en algunos de sus establecimientos en Houston. El retiro, tan discrecional como preventivo de los ejemplares, ha coincidido con declaraciones de líderes comunitarios vinculados a la campaña de Barack Obama, que han advertido contra los intentos de enfrentar a las comunidades hispana y afroestadounidense en plena campaña electoral.

“Qué casualidad que haya sido en Texas, un bastión republicano, donde se están dando estas protestas. Tal parece que hay quienes siguen interesados en crear pretextos para acentuar divisiones entre hispanos y afroestadounidenses con un personaje que nada tiene que ver con la realidad política de Estados Unidos”, aseguró Juan José Gutiérrez, de la organización Latino USA y miembro de la campaña de Obama en California.

Desde la editorial Vid, dueña de la imagen y los derechos de Memín Pinguín, sus responsables aseguran que la historieta “no tienen nada que ver con la actual campaña en Estados Unidos”, mientras invitan a sus detractores en la Unión Americana a conocer más de cerca de una de las figuras más entrañables de la cultura del cómic en México.

“Es increíble que protesten contra Memín Pinguín, un personaje que lucha contra la discriminación y que resalta la belleza espiritual por encima del aspecto físico, pero no dicen nada contra algunas de las películas de Eddie Murphy que se venden también en Wal Mart y que, ésas sí, ridiculizan a los afroamericanos con personajes que se convierten en mujeres gordas de más de 400 kilogramos”, consideró Manelik de la Parra, presidente del Grupo Editorial Vid.

“Tenemos tres años de vender las historietas de Memín Pinguín en Estados Unidos y nunca habíamos tenido problemas. Pero, al parecer, algunos tienen sus motivos políticos y se empeñan en ver racismo donde no lo hay”, insistió De la Parra.

Las protestas contra Memín Pinguín han sido protagonizadas en Houston por personajes como Qanell X, un viejo conocido de la comunidad afroestadounidense en Texas por sus desencuentros con la policía y su participación en episodios de violencia.

La segunda nota sí me ha causado más extrañeza porque viene de alguien a quien leo y me parece una persona preparada. Escribe el siguiente título: "La antiespaña no descansa, ni siquiera en México", y referencia con él la siguiente nota: Un anciano organiza un curso de ayapaneco para salvar un idioma que sólo hablan dos personas. Quise poner un comentario en su blog pero no me fue posible porque se tiene que estar registrado, pero quisiera preguntarle el por qué de este título y ¿dónde está en la nota lo antiespañol? o ¿es burla y no comprendo?

Aclaración, 11 de julio:

Agradezco a Alberto Haj-Saleh, su pertinente comentario sobre el texto de Escolar. Si desean, pueden leerlo AQUÍ.

Y sobre esta polémica tan tonta (pero tan conveniente para ellos en este momento) que ha abierto algunos políticos de Estados Unidos, dejo un excelente comentario de un visitante de este blog, muchas gracias. Fernando Acevedo, un mexicano que nos escribe desde Italia, AQUÍ lo pueden leer.

14 comments:

Anónimo dijo...

La polémica que ha causado Memín, gracias al gobierno de EU, no es de extrañar para nosotros, cierto. Y luego se ponen a prohibir las canciones de Molotov, vaya señores.

Lo de Escolar si que también me asombró, pensé que era inteligente o, seguramente, sucede que de la cultura mexicana es un total ignorante. Pero creo que le debe de importar nada la opinión que se tenga de su osadía. Como dice usted: la ignorancia es atrevida.

Magda Díaz Morales dijo...

Lo que tiene gracia, es que diga que esto va en contra del castellano, siendo que para nosotros el castellano sería segunda lengua, aunque impere.

En fin, es penoso que existan estas cabriolas de algunos periodistas para cambiar las cosas sin ponerse a pensar lo que generan. Yo lo lamento, era una persona a la que tenia reconocimiento.

Anónimo dijo...

Sí, Magda, efectivamente es una ironía ese titular de Escolar. Desde hace unas semanas el partido político UPyD en España ha impulsado un manifiesto en defensa del español en el diario El Mundo. Aquí el texto del manifiesto. Este texto no es otra cosa que una artimaña política, un intento de polarizar y enfrentar a los hablantes de otras lenguas de España (catalán, gallego, euskara) con los castellanoparlantes. En Libro de Notas Xoan Carlos Lagarés ha publicado un artículo de opinión al respecto.

El enlace de Escolar es una burla a los firmantes y promotores de ese manifiesto, ya que la postura que sostiene el periodista director de "Público" es que desde ese manifiesto se intenta vender la (ridícula) idea de que el castellano se rompe y que quien habla, no sé, gallego, es porque es antiespañol. Por eso enlaza la noticia del curso de ayapaneco, ironizando, como diciendo "Qué, ¿hacer un curso de ayapaneco también va contra el castellano?".

Espero haber puesto un poco de luz sobre el tema.

Un saludo.

Rafa Martínez dijo...

Raro sería que algunos estadounidenses dejaran de meter sus narices en todos lados. Sin embargo, menciona que tienen tres años vendiendo el comic en el otro lado. ¿Porqué ahorita? A veces siento que cada grupo tiene su idea de lo que ellos consideran racismo. Hace rato leí que Jesse James consideraba que Barack Obama "trataba con desdén a los afroamericanos". No sé si esto sea muy cierto, no tengo mucho conocimiento sobre la política gringa, pero siento que refuerza mi teoría.
Por otro lado, creo que es Memín Pingüín. Con diéresis. No estoy muy seguro, pero por aquí tengo algún ejemplar, nomás es cuestión de buscarlo. En cuanto lo encuentre, confirmo.
Saludos a los lectores.

Magda Díaz Morales dijo...

Alberto, muchas gracias por tu comentario que ha traido totalmente la luz a este tema. Mi ignorancia respecto a lo dices, y el de muchos comentaristas que han comentado en este texto de Escolar, hace el resto.

Ahora que he leido el manifiesto y el texto de Xoan Carlos, lo entiendo todo. Es delicado para mi comentar sobre todo esto del castellano en España, solo puedo decir que estoy totalmente de acuerdo contigo de que es ridiculo pensar que el castellano se rompa. Bastaría con pensar en todo Latinoamérica, en Estados Unidos donde es la segunda lengua por tanto latinoamericano que lo ha llevado, etc., y tampoco creo que se sea antiespañol si se habla catalán, gallego, etc. Comprendo perfectamente porque Escolar da este ejemplo del ayapaneco. Daré la explicación que nos ofreces, te lo agradezco mucho.

Magda Díaz Morales dijo...

Malagueño, cierto, muchos escriben Pingüin con diérisis, que vendría de pingüino y no de pingo. Pero segun se dice, su creadora le puso este nombre porque lo tomó del apodo de su esposo, pingo, de travieso.

Yo no me acuerdo como salió el primer número, si con diérisis o sin ellas. A mi me parece que es por travieso y no por pingüino.

Lo de Estados Unidos es totalmente político. Siempre hacen lo mismo, nosotros lo sabemos de sobra. Lo que es incomprensible, es que esta nota salga a ocho columnas diciendo lo que Estados Unidos piensa sobre el comic y no lo que Estados Unidos acostumbra hacer siempre para su publicidad política, haceres conocidos por todo el mundo.

entrenomadas dijo...

Vuestros comentarios me han hecho entender mejor la polemica. Y esto de acuerdo con Magda, completamente.

Un beso,
M

Magda Díaz Morales dijo...

Querida Marta ¿algún dia veremos que se acaba este horrendo y triste espectáculo de los toros?

Anónimo dijo...

Estimada Magda:

Hace tiempo que vengo de visita a su blog, encontrándome siempre con muy buenas entradas, por lo que la felicito y envidio.

Hasta donde recuerdo, el "pinguín" de la historieta mexicana sí viene del diminutivo de "pingo" (pingo=diablo, pinguín=diablillo). Lo que no sabía era lo del esposo de la Vargas Dulché.

Acerca de Memín tengo una anécdeota (que más bien son dos): durante años la portada de la historieta se publicó sin diéresis en manera correcta, pero por alguna razón que no alcanzo a comprender la gente lo comenzó a llamar "pingüín", no obstante se leyera claramente impreso "pinguín". Tanto se hizo popular llamarlo "Memín pingüín" que comenzó a salir a la venta (alguna de las reediciones que menciona) con diéresis: ¡se modificó el nombre y su sentido sólo para dar razón al error de casi todo un pueblo! Un ejemplo terrible no de evolución del idioma sino de su empobrecimiento debido al muy democrático pero no siempre correcto "vox populi, vox dei".

Decía que más bien eran dos anécdotas. Si usted es mexicana sabrá que existen unos pastelitos de chocolate rellenos de crema llamados "Pingüinos", ello sí debido al nombre del animal. Pues bien, un día descubrí con asombro que el nombre impreso en la envoltura de dichos pastelitos NO tenía diéresis. Alguien se dio cuenta en los años '90 y lo corrigió, pero fue curioso darme cuenta que durante años me engolosiné con "Pinguinos" y no con "Pingüinos".

Bien, sobre la protesta por supuestamente racista en contra del Memín, habría que hacer ver a los norteamericanos que ellos siempre se han mostrado un pueblo racista por excelencia y continúan siéndolo. Las pruebas saltan a la vista, como en el ejemplo que se menciona de las películas de Eddie Murphy: basta ver los estereotipos de series como "Fresh Prince of Bel Air" (con Will Smith), donde la familia entera es un catálogo de lo que el pueblo norteamericano considera "modos pertenecientes exclusivamente a los 'negros'". ¿No nos los venden siempre como 'rappers', con pantalones enormes, con gorrita de basket ball, llenos de pulseras y collares enormes de oro, gordos, con algún diente cubierto de oro y siempre vestidos "estrafalariamente"?

Es más, ¿no es cierto que ellos mismos (los norteamericanos) siguen la carrera de Obama hacia la presidencia con tanta atención "por ser el primer candidato de color"? ¿Y qué importancia debería tener eso para un pueblo que ahora quiere descubrirse no racista? Si un pueblo verdaderamente NO es racista, ¿no debería seguir, comentar, votar, criticar y demás a Obama como si fuera un ser humano como todos los demás (que lo es), y no teniendo siempre por delante el hecho de que es de color?

La dejo con una reflexión: Si a la gente de raza negra se le llama "de color", ¿los que NO somos de raza negra somos "gente incolora" o "de no color"?

¿Se ha dado cuenta que mientras que en nuestro país llamar a alguien "negro", "negrito", "mi negro" son muestras de cariño y de confianza, en los E.U. prácticamente obligan a la gente a no usar estos términos y se inventan cosas como "personas de color" (hasta hace algunos años) o "afroamericanos" (a partir de hace relativamente poco)?

Si uno, en presencia de un "afroamericano" pide a un niño describir a esta persona, es seguro que entre las cosas que dirá será "es negro". No hay malicia en ello: el niño simplemente describe lo que ve y no por eso es racista. Lo mismo nos pasaba cuando leíamos las aventuras de Memín: no veíamos a un "cochino negro" (este término muy norteamericano, incluso muy usado en las películas y series actuales), sino al "negrito lindo" cuyas aventuras nos acompañaron por buena parte de la infancia.

Es eso lo que deberían saber quienes protestan en contra de la historieta.

Un saludo.
Fernando (desde Italia).

Magda Díaz Morales dijo...

Fernando, ante todo, bienvenido. Un placer conocerte desde la bella Italia.

Dices muchas cosas interesantes y con todas estoy totalmente de acuerdo. Es pinguín, de pingo, diblillo o travieso, no de pingüino, por supuesto. Me imagino, no lo se, que la gente empezó a llamarlo pingüin porque leían la u, aunque no tuviera diérisis, y esto desafortunadamente se hizo un error muy feo y transformando y desvirtuando la realidad, el nombre del personaje. Se me hace también un ejemplo terrible al democrático "vox populi, vox dei". En el Estado donde vivo ahora, muchas personas dicen (y los estudiantes mismos): "fuistes", "comprastes", "trajistes",y se está haciendo esa terrible "vox populi, vox dei" de la que hablamos. En lo personal me parece terrible.

Cómo no, hasta la fecha como de vez en cuando los pingüinos, comida chatarra pero muy rica, la esposa de un amigo, que es húngara, dice que una de las cosas que le fascinan cuando viene a México, es comer los "pingüinos". Ignoraba la anécdota que nos cuentas, qué vergüenza ajena. Ahora se que yo también me engolosiné con "pinguinos" y no con "pingüinos".

Por lo demás, todo lo que atinadamente señalas sobre el tema de Memin y la polémica que ha causado en EU, me parece excelente. Debemos tener presente que por aquellos lares no escuchan lo que no les conviene escuchar ni asumen lo que no les conviene asumir.

Bien que saben que aquí en México llamar a alguien "negro", "negrito", "mi negro" son muestras de cariño y de confianza. Y es totalmente cierto que quienes leímos de niños, y los que lo leen ahora, veíamos en Memín ese "negrito lindo" que nos hacía vivir a su lado sus aventuras.

Ayer precisamente le decía a una amiga que en Estados Unidos obligan a la gente a no usar estos términos y se inventan cosas como "personas de color" o "afroamericanos". Y, además, ¿quién no sabe que el racismo por allá es cosa de todos los días? aunque quieran tapar el sol con un dedo.

Y sí, no había pensado: "si a la gente de raza negra se le llama "de color", ¿los que no somos de raza negra somos "gente incolora" o "de no color"?

Pero sabes que es lo que preocupa, que la gente que lee la nota a tres, cinco u ocho columnas en El país o en cualquier otro periódico internacional, diciendo: "Racismo en México a través de la historieta Memín Pinguín", se lo cree.

Un abrazo para ti.

Anónimo dijo...

Querida Magda,

Solo un apunte: tambien sé que hay gente como yo que deja de leer las noticias de los periódicos por la mañana para leer los blogs con similares notícias pero cargadas de matices que dificilmente puedes encontrar en un periódico.

Gracias a internet podemos elegir donde leer!!..nos sentimos cerca unos de otros aunque estemos en paises distintos.
Saludos a todos todos.

lulu

Baakanit dijo...

Muy interesante los que nos cuentas Magda. Por eso es tan importante saber el contexto de cada obra.

Yo no culpo a los Norteamericanos, si yo no conociese a Memín y viera la portada de su historieta por primera vez consideraría que es una publicación racista. Negritos parecidos a Memín, aparecían en los dibujos animados de Bugs Bunny, y ya en los canales de muñequitos no los presentan, al igual de los capítulos en los cuales aparecen Indios Americanos. Todos esos episodios que podrían ser tomados como ofensivos han desaparecido.

En latinoamérica nuestros países son muy racistas, especialmente con los indígenas y las personas de raza negra. Burlarse del negrito, en nuestros países es algo pasable. Un ejemplo de eso era Cirilo en la telenovela Mexicana Carrousel de Niños.

En cuanto a las películas de Eddie Murphy, pasa algo que va con la dinámica Estadounidense que pocos fuera de este país pueden captar.

Si a un blanco le nace la idea de crear una película como esas de Eddie Murphy, se le consideraría como racista.

Si un negro la crea, como ha sido el caso no hay ningún problema, nadie ataca a esos estereotipos.

En cuanto a la serie del Fresh Prince, o el Príncipe del Rap, vi que alguién la mencionó. Yo creo que ha sido una serie muy buen lograda. Ya que se aleja de la imagen negativa y de mucho de los estereotipos de los afroamericano, ya que la familia que nos muestra es una familia de dinero, con educación y bastante preparada, que quiere llevar por el buen camino a Will Smith. El mensaje de esa serie es muy positivo, es una serie que trascendió las líneas raciales. Así como la disfrutaron los Dominicanos, la disfrutaron los blanquitos, los afroamericanos y los asiáticos.

P.D. No sé si eliminaste los comentarios por un tiempo, ya que visité tu blogs varias veces y no hallaba por donde comentar. Supongo que fue algo temporal, o que quizás algunos posts no requerían comentarios.

Como siempre Magda, he disfrutado de tu casa y tus buenos posts.

Ciao

Magda Díaz Morales dijo...

Si, Baakanit, estuvieron cerrados los comentarios un tiempo. Lo anuncié aqui mismo, fue por demasiado trabajo. Pero ya estamos nuevamente aqui.

Muchas gracias por tu comentario.

Anónimo dijo...

Pero ¿sabe? también hay tarados que piensan que por publicarse Memín, los mexicanos son racistas, esos "contreras" que nunca faltan para hacerse notar. Se porque se lo digo, de que los hay, los hay.

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